Los amigos que me quieren y los quiero
Deberían estar siempre para ver su rostro
Surcar las paredes invisibles del canto
Desbandarse por la banda más limpia,
Olvido a veces los nombres, quiénes son
Sé que no es normal pero sé que a veces pasa
Eso de lo uno por lo otro, eso de catarnos
y permanecer, como estatuas, en nosotros mismos.
Nunca quise olvidar el brindis y la promesa de primavera,
la borrachera fue verdad y lúcido el canto en el inmenso.
Los amigos pasan y uno pasa y solo queda un desconocido
Que aman, que desconozco, que creo ser.